Limpiezas dentales (raspado y pulido)
Una limpieza dental, también llamada raspado y pulido o profilaxis, es un tratamiento profesional para eliminar la placa (una película blanda y pegajosa) y el sarro (depósitos endurecidos) de los dientes. Incluso con un cepillado regular, estos depósitos se acumulan con el tiempo y pueden provocar problemas de encías y caries. Las limpiezas ayudan a prevenir enfermedades de las encías, proteger los dientes y mantener una sonrisa fresca y saludable.
Durante una limpieza, su dentista o higienista hará lo siguiente:
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Eliminar depósitos de sarro más grandes utilizando instrumentos ultrasónicos suaves.
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Raspar la acumulación más pequeña con herramientas manuales de precisión para dejar sus dientes suaves.
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Pulir tus dientes para conseguir un acabado brillante y limpio.
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Aplicar flúor para fortalecer y proteger el esmalte, ayudando a prevenir las caries.
La mayoría de las limpiezas son indoloras y cómodas, con solo cosquilleo o presión ocasional. Si ha tenido sensibilidad dental o molestias en el pasado, su equipo dental puede usar técnicas suaves, anestesia tópica o incluso óxido nitroso para que su visita sea más placentera.
Las limpiezas dentales regulares son esenciales para mantener las encías sanas, prevenir problemas dentales, mantener una sonrisa brillante y dejar tus dientes maravillosamente suaves.
